12-09-2022
Consejos
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Muchos os preguntáis si es rentable comprar un coche eléctrico en el 2023. Y es normal que aparezca esa pregunta frente a todos los cambios que se están aplicando en las distintas ciudades europeas. En la actualidad, invertir en un coche eléctrico requiere de mayor desembolso de dinero que un coche convencional. Pero hay que analizar a largo plazo cuáles son sus ventajas y si realmente compensa o no.
Índice de contenidos
¿Qué diferencia existe entre comprar un coche eléctrico y uno convencional?
Para saber si realmente es rentable comprar un coche eléctrico en esta época tenemos que revisar las diferencias entre un coche de esas características y uno convencional. Así se podrá llegar a la conclusión de si merece o no la pena la inversión en este momento. Dentro de los distintos aspectos que se deben valorar para tomar la decisión se encuentran:
¿Cuál es la autonomía de un coche eléctrico?
Se trata del punto más complejo de todos y por el que la mayoría de personas dudan de si comprar un coche eléctrico o no. Con el paso de los años, la autonomía de los coches eléctricos ha ido en aumento, por lo que se espera que pase a ser algo normal para todos y no un problema.
En la actualidad, la mayoría de coches eléctricos te permiten hacer trayectos urbanos sin tener que recargarlo. El problema viene cuando se busca un coche que sea íntegramente eléctrico para hacer un viaje largo. Seguramente a medio camino habrá que buscar un sitio de recargas. Y aquí es donde aparece otro de los conflictos: encontrar un punto de recarga para un coche eléctrico.
Muchos hoteles, y algunas estaciones de servicio están incorporando este elemento, pero aún son muy pocos y dependiendo de tu ruta, puede que no encuentres con facilidad uno de ellos. La solución para las personas que aún así quieran un coche eléctrico es utilizar un vehículo convencional para trayectos largos.
Precio del vehículo eléctrico
Evidentemente por todas sus características y lo que ofrecen, los coches eléctricos son más caros que los convencionales. Hay que destacar que existen ayudas específicas para la compra de estos coches ya que se busca cambiar por completo el parque de vehículos nacional.
Hoy en día, un coche eléctrico se posiciona entre los 5 mil a los 15 mil euros por encima de un coche convencional.
Ahorro en combustible
Está claro que quien busca un coche eléctrico lo que quiere es tener un vehículo que se adapte a las nuevas medidas y ahorrar a largo plazo. Dejar atrás el consumo de combustible y con ello también ayudar al medioambiente. Si bien es cierto que hay que pagar la recarga del mismo, el precio del kWh frente al litro de combustible es abismal. Un kWh en lo que se considera hora valle cuesta menos de 0,10 céntimos, mientras que la gasolina sabemos que el precio va en aumento y que nos colocamos ahora mismo sobre los 1,5 euros por lo bajo.
Para recorrer unos 100 km, con un coche eléctrico se necesitarían unos 45 kWh y con uno convencional la media se pone en unos 5 litros. Por lo tanto, un coche a combustible tendría un gasto de casi cinco veces más que uno eléctrico.
Puntos de recarga
Ya adelantamos anteriormente que uno de los inconvenientes actuales de los coches eléctricos son los puntos de recarga. Puedes tener tu punto de recarga para abaratar los costes en tu propio garaje. Si estás en un garaje comunitario también puedes tener una instalación de este estilo aunque será más costosa.
En algunos Centros Comerciales existen puntos de recargas gratuitos así como también en parkings, gasolineras y hoteles. El problema parte de que aún no son tan masivos y si te decides a hacer un viaje largo con tu coche eléctrico tendrás que tener muy bien planificados los puntos de recarga. De lo contrario, te quedarás a mitad de camino, además de que hará falta tener más de una opción por cualquier tipo de inconveniente.
A muchas personas este punto los pone tensos y nerviosos y temen no poder recargar su vehículo y quedarse en medio de la carretera. Como cualquier cosa nueva, hace falta que exista más demanda para que los puntos de recarga vayan en aumento. Y es algo que se estima sucederá de aquí a muy pocos años.
Mantenimiento y reparación tras comprar un coche eléctrico
En un coche convencional, el mantenimiento y las reparaciones son constantes. Si un día no es la correa, es el embrague, el cambio de aceite, etc. Cuando se tiene un coche eléctrico todo ello no sucede ya que hay muchos elementos que no los contiene y por lo tanto que no necesitarán reparación ni mantenimiento. A largo plazo, esto puede reflejarse en un ahorro de hasta un 35% frente a lo que se gastaría en la reparación anual de un coche tradicional.
Aparcamiento de los coches
Las grandes ciudades buscan cuidar el medioambiente y por ese motivo es que han decidido limitar la entrada de ciertos vehículos al centro. Con un coche eléctrico no tendrás ese problema ya que tiene emisión cero. Además, a la hora de aparcar, se cuenta con ciertos beneficios en lugares como lo son la zona azul. Es otro ahorro más que te puede aportar un coche eléctrico frente a un vehículo convencional.
Pago de impuestos al comprar un coche eléctrico
Dependiendo de dónde vivas y esté matriculado el coche, podrás acceder a unas ventajas fiscales más que interesantes. Principalmente verás estos descuentos en el Impuesto de Circulación en donde en algunas provincias llega a ser de más del 75%. Puedes consultar todo ello en el Ayuntamiento de tu ciudad acerca de cuáles son los beneficios fiscales por comprar un coche eléctrico.
Viendo todos los elementos anteriores, la conclusión sería que sí es rentable comprar un coche eléctrico en 2023. La amortización se hará en menos tiempo del esperado y si haces cuentas verás que el sobrecoste que pagues en su compra frente a un coche convencional lo estarás ahorrando en alguno de los puntos mencionados anteriormente.
